sábado, 23 de febrero de 2013


Que se te forme un nudo en la garganta, que no te concentres en ninguna explicación ni en las cosas que te manda a hacer mamá. Sentir que te falta algo, algo que es esencial, algo que te llena de vida, que te saca de tus casillas. Querer un abrazo, de esos fuertes, de esos con tanto amor. Desear una de esas conversaciones hasta las tantas de la madrugada, pero no conseguirlas. Haber formado tanto orgullo que no quisieras mover un dedo por nadie. Que tenga una barrera tan grande tu corazón que te impida ver más allá de las mentiras. Verlo todo feo, verlo todo gris, todo negro. Un día de tempestad, de mucho viento, de paraguas rotos y Poppins volando hasta el País de Nunca Jamás y allí cuidar eternamente de los niños perdidos. Ser estúpida, contestar mal, no dirigir la palabra. Que se llenen todo tu ser de celos hacía otras personas. Callar te quieros que, por miedo a no ser aceptados, aún no han salido de las bocas deseadas, aunque seguro que aquellos oídos los está deseando escuchar.

Eso es echar de menos. Lo demás es fingir que te falta algo que en realidad nunca quisiste.




-¿Por qué sigues engañándote? A ti ,y también a mi. Dime lo que piensas, te sentirás mejor. 
- No sentía nada y nunca me han gustado las personas como él.
-Pero ahora... Ahora quieres algo, ¿verdad?
-Ahora quiero cosas que hacía tiempo no quería, y de vez en cuando me engaño porque creo que no puedo tenerlas.

"Tu dolor nadie lo siente, tus alegrías nadie las nota, tus tristezas nadie las ve... Pero pórtate mal, comete un error y todos te criticarán."


viernes, 22 de febrero de 2013

Si te fijas, tú siempre estás presente. En boca de alguien. Apuesto a que nunca te habías dado cuenta de eso. Pues bien, hoy solo quiero decirte que, al menos para mi, eres especial, y que nadie más ha conseguido eso.




Quedarte callada y asimilar que tú no tienes por qué ser la única que pueda conseguir sus caricias. Que los demás también pueden, y eso no está nada mal. Pero nos definen a los seres humanos como personas egoístas que sólo pensamos en nosotros mismos, y creo que en este momento no puedo negarlo. Aciertan. 
Y acertarían si dijesen que todo ya ha ido demasiado lejos, que me enfado con facilidad al ver gestos que solo quiero que tenga conmigo, porque me notaba especial. Y creo que ahora ya no. Acertarían si dijeses que ya lo tengo demasiado metido en la cabeza, y en el corazón. Si por un solo instante podría dar cualquier cosa por alguna de sus tonterías, o simplemente por una última sonrisa suya.
Echaría de menos todo aquello que está empezando a ser esencial. Y hoy es uno de esos días. Días en los que no quieres saber nada de nadie, ni de tan siquiera de esa persona. Pero que lo dejarías todo para que te sacaran una sonrisa, sabiendo que ellos no son los únicos que se encuentran mal, que tu lo estás desde hace bastante tiempo y no has dicho nada. ¿Verdad? ¿Verdad que duele todo esto? Quisieras que se dieran cuenta de que necesitas un abrazo, de aquellos que te da un extraño, y en cambio un pilar de tu vida no. Necesitas que sepan que les echas de menos. Que quieres continuar, pero a mejor. Levantarte cada mañana con una sonrisa o, al menos, intentarlo. 
Quieres sus caricias, sus besos en la mejilla, sus mordiscos en el brazo, que vega por detrás y que se tire encima tuyo. Que te agarre y te diga que "de aquí no te mueves" y tú no rechistar. Quieres escuchar que "eres especial" aunque sea otra mentira más. Escucharlo, de cualquiera, pero escucharlo. Sentirte por un puto segundo, sólo uno, imprescindible para alguien y que se te clave en el corazón como una daga. 



"Love is old, 
love is new,
love is all, 
love is you."

-The Beatles.

sábado, 16 de febrero de 2013


Esta canción me apasiona.





El piano... El piano es genial.



Amo este último videoclip. El batería se sale.


-Vilma, no me he acostado con Max. Y bajo la voz porque ahí está mi padre.
-Ya, y yo soy idiota y me lo creo. No pasa nada. Ha habido sexo pero si no me lo quieres decir porque eres una princesa y de eso no se habla, pues nada.
-Vilma, no ha pasado nada. Y no sé si quiero que pase. Max me gusta, me gusta mucho, pero es que cada vez que cierro los ojos a quien veo es a Ulises.
-Pues asúmelo mi amor, todavía aquí sigues estando con Ulises, y no has cortado con él. 



viernes, 15 de febrero de 2013

- ¿Qué ha pasado?
-¿Qué ha pasado? Que los chupetes se convierten en cigarros, el agua en vodka, las bicicletas en coches y los besos en sexo. ¿Te acuerdas cuando volar significaba columpiarse muy rápido? ¿Cuando "protección" significaba utilizar casco al ir en bicicleta? ¿Cuando lo peor que podías recibir de una persona eran piojos? ¿Cuando sólo amábamos a nuestros padres? Los hombros de papá eran el lugar más alto del mundo y mamá era una heroína. Tu peor enemigo era tu hermano, los problemas de velocidad eran causados por quién corría más rápido, "Guerra" era sólo un juego y la única droga que conocías era el remedio para la tos. El dolor más fuerte que podías sentir era el de tus rodillas raspadas y "Adiós" significaba únicamente "Hasta mañana". Todo esto era lo mejor del mundo, pero no pudimos esperar a crecer.



¿ Sabes qué me apetece ? Me apetece besar. Un beso de esos lentos en los que los dos estáis muy pegados, en los que no hay nada al rededor, solo vosotros dos y vuestros labios, transmitiendo todo lo que sentís el uno por el otro. O quizás un beso apasionado de esos en los que no se está suficientemente cerca el uno del otro, donde las manos no paran quietas memorizando cada espacio de su cuerpo. También uno de esos besos frescos, que se dan porque sí, porque te apetece y vas y le besas, sin importar lo que estés haciendo ni donde estés, y que acaban con una sonrisa que refleja todo lo que sientes por él. O ese pequeño beso que se le da en la mejilla, en el hombro, en cualquier parte de él que esté cerca de tus labios, ese pequeño beso cargado de ternura y confianza.
Me apetece que me besen, que me roben un beso y que cuando vayas a gritarle se vaya sonriendo. Me apetece que enreden sus dedos en mi pelo, que bajen sus manos por mi espalda, que me da igual las manos que sean, que no me voy a parar dos veces a examinarlas, que van a ser unas y después otras.




Contigo me imaginé las mejores noches, los mejores besos, esos abrazos que dicen "no te alejes de mi". Imaginé tus manos, tu cuerpo, tu voz, tus susurros en mi oído, tus caricias. Imaginé nuestras eternas charlas, nuestros juegos de quien dura más sin reír primero, nuestras despedidas, nuestras llamadas y mensajes. Imaginé todo lo inimaginable pero, ¿todo eso puede convertirse en una dulce realidad? 





domingo, 10 de febrero de 2013

Nada bueno que contar.


Para qué decir algo, si nada se va a solucionar. Me cansé de ir detrás, de preguntar, de preocuparme. Me cansé de ser celosa, de enfadarme con o sin motivos. Me cansé, y ahora me doy cuenta. Me doy cuenta de que es más fácil hacer como si nada me preocupara, como si todo estuviera intacto. Es más fácil así, sin decir lo que pienso, creo y odio. Porque es la verdad, odio como pasan las semanas tan lentamente y nadie haga nada para que pasen más rápido. Odio como ha cambiado todo. Odio como se puede cambiar tanto de opinión, de un día para el otro. Que un día nos vemos y al siguiente para que recordarnos. Que un día te echo mucho de menos y al otro no me hablas. Estoy harta, y cada vez más. Que parece mentira que esté pasando todo esto, y que tal vez tenga que volver un poco para atrás para recuperar algunas cosas del pasado. Tal vez he dado muy rápido todo aquello que tenía, y ahora ya no me queda nada. Nada bueno que contar.


"Soñábamos con caer al vacío."



sábado, 9 de febrero de 2013


Charlie: ¿Por qué las buenas personas, eligen a los equivocados para salir?
Sr. Anderson: Aceptamos el amor que creemos merecer.
Charlie: ¿Podemos demostrarles que merecen más?
Sr. Anderson: Podemos intentarlo.


"Por lo tanto, esta es mi vida. Y estoy, al mismo tiempo, feliz y triste. Y todavía estoy tratando de descubrir cómo puede eso ser posible.

Únicamente por placer.


Después de algún tiempo aprenderás la diferencia entre dar la mano y socorrer a un alma.
Y  aprenderás que amar no significa apoyarse, y que compañía no siempre significa seguridad. Comenzarás a aprender que los besos no son contratos, ni regalos, ni promesas. 
Comenzarás a aceptar tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un adulto y no con la tristeza de un niñoY aprenderás a construir hoy todos tus caminos, porque el terreno de mañana es incierto para los proyectos y el futuro tiene la costumbre de caer en el vacío. 
Después de un tiempo aprenderás que el sol quema sí te expones demasiado. Aceptarás que incluso las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitarás perdonarlas. Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma. Descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirlay que tu también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de la vida. Aprenderás que las verdaderas amistades continúan creciendo a pesar de las distanciasY que no importa que es lo que tienes, sino a quien tienes en la vida. Y que los buenos amigos son la familia que nos permitimos elegirAprenderás que no tenemos que cambiar de amigos, sí estamos dispuestos a aceptar que los amigos cambianTe darás cuenta que puedes pasar buenos momentos con tu mejor amigo haciendo cualquier cosa o nada, solo por el placer de disfrutar su compañíaDescubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las personas que más te importan y por eso siempre debemos decir a esas personas que las amamos, porque nunca
estaremos seguros de cuando será la ultima vez que las veamos. Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que nos rodea tienen influencia sobre nosotros, pero nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos. Comenzarás a aprender que no nos debemos comparar con los demás, salvo cuando queramos imitarlos para mejorar. Descubrirás que se lleva mucho tiempo para llegar a ser la persona que quieres ser, y que el
tiempo es corto. Aprenderás que no importa a donde llegaste, sino a donde te diriges y si no lo sabes cualquier lugar sirve. Aprenderás que si no controlas tus actos, ellos te controlarán y que ser flexible no significa ser débil o no tener personalidad,
porque no importa cuan delicada y frágil sea una situación: siempre existen dos ladosAprenderás que héroes son las personas que hicieron lo que era necesario, enfrentando las consecuenciasAprenderás que la paciencia requiere mucha práctica. Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las
pocas que te ayuden a levantarte. Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de
las experiencias, que con los años vividos. Aprenderás que hay mucho más de tus padres en ti de lo que suponesAprenderás que nunca se debe decir a un niño que sus sueños son tonterías, porque pocas cosas son tan humillantes y sería una tragedia si lo creyese porque
le estarás quitando la esperanza. Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a
tenerla, pero eso no te da el derecho de ser cruel. Descubrirás que solo porque alguien no te ama de la forma que quieres, no significa que no te ame con todo lo que puede, porque hay personas que nos aman, pero que no saben como demostrarlo...
No siempre es suficiente ser perdonado por alguien, algunas veces tendrás que aprender a perdonarte a ti mismo. Aprenderás que con la misma severidad con que juzgas, también serás juzgado y en algún momento condenado. Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo arreglesAprenderás que el tiempo no es algo que pueda volver hacia atrás, por lo tanto, debes cultivar tu propio jardín y decorar tu alma, en vez de esperar que alguien te traiga flores.
Entonces y solo entonces sabrás realmente lo que puedes soportar; que eres fuerte y que podrás ir mucho mas lejos de lo que pensabas cuando creías que no se podía más. ¡Es que realmente la vida vale cuando tienes el valor de enfrentarla!

-Shakespeare

viernes, 8 de febrero de 2013

"No sé vosotros, pero para mi este es un de los momentos mas épicos de mi infancia. Esa etapa de la vida de la ahora solo te acuerdas de pocas cosas pero la mayoría buenas. Que con las cosas pequeñas te sentías la persona más feliz del mundo. Sin obligaciones, sin exámenes ni deberes que hacer y tu única preocupación era no perderte tu serie favorita de la televisión. No pensabas en tu futuro, lo hacían por ti."

PD:Parece mentira, pero da que pensar la última frase.

Dulce olvido.

La situación era distinta a cada momento. Cada minuto, cada hora, cada día, cada puta semana era un estado de ánimo diferente, y la verdad es que nadie tenía la culpa de eso. Era algo lógico, pero nadie hacía nada para remediarlo. Remediar la distancia, el olvido, las ganas de encontrarse, de hablar, de explicar cuantas veces te habías tropezado al día. Ya no había tiempo para esas tonterías, y ni siquiera para lo fundamental de "Hola, ¿como estás?". Ni siquiera para desear las buenas noches, aunque tampoco habían ganas de hacerlo. Hacer todo aquello que en un día era fundamental para todos, y que ahora ha pasado a segundo, tercero y cuarto plano. Hasta el momento más tierno ya era frío, ya no tenía tanta emoción un abrazo. Ni tampoco los besos que nos dedicábamos de una manera un tanto especial. Todo aquello se perdió, ya lo sabía. Lo sabía de sobras que eso se había acabo hacía ya mucho tiempo, pero aún seguíamos engañados, hasta tal punto que nos engañábamos a nosotros mismos pensando que eso nos aliviaría. Pero la verdad es que no, la herida sigue intacta desde aquel día en que dejamos de ser uno, para convertirnos en personas distintas. En personas con maneras de pensar diferentes. En apasionados extraños desde hacía ya bastante tiempo.




No me cojas más, no me muerdas la oreja o me acaricies la cara. No me des comida a escondidas ni me susurres al oído. No me peines el pelo ni me dejes apoyar mi pierna en la tuya. No me esperes cada vez que nos tenemos que ir. No me cojas de la mano. De verdad, no lo hagas aunque me encante porque yo no puedo seguir así, sin saber que está pasando. Si tengo que creer en todos los que me dicen que sí es cierto lo que estamos sintiendo, o simplemente eres así con todas. 
No te creas a todos aquellos que hacen que te caigas, eres demasiado alto y firme para hacerlo. No digas que no tienes una sonrisa bonita, porque con ella haces brillar el día más oscuro. Hazme caso y cuéntamelo todo, hasta el mínimo detalle. Quiero saber todo aquello que ha nadie más has explicado, todo aquello que te hacía llorar. 
Hazme caso, y no pienses en lo malo. Piensa en todo aquello que tienes, y todas las que quisieran tener algo como tú.