martes, 28 de agosto de 2012

Segundas partes nunca fueron buenas.


Dicen que lo que cuenta es lo que se hace la primera vez y que las segundas partes nunca fueron buenas, pero que a la tercera va la vencida. También dicen que es bueno dar una, dos, tres y hasta cuatro oportunidades o más… Pero ¡eh!, que tal vez te acabe gustando caer por culpa de esa piedra.
Que siempre que ganas, pierdes algo. Y que perdiendo, también se gana. Que puede ser que después te arrepientas de algo y te quedes con las ganas de saber que habría pasado, pero que pasado pisado y que si te he visto no me acuerdo! Que unos con tanto y otros con tan poco, pero que si tienes días malos no te hundas… aprende a bailar bajo la lluvia y ya está. Y que puedes chapar bocas, pero que callar también es gratis, así que haz callar a todos aquellos que hacen que tengas mala fama… Y a los que no te quieran, que se jodan. Ellos se lo pierden, aunque a quien le duele todo esto es a nosotros, y no a ellos. Que sentir dolor es inevitable, pero que sufrir es opcional, aunque ahora es la única opción que tengo por algún que otro cabrón. Que si sabes como vivir puedes vivirlo todo, pero que de vidas solo hay una y no puedes perder el tiempo porque este a la vez no volverá nunca. Que no se siente el cebo hasta que por fin se muerde, y que tampoco se echa de menos algo o alguien hasta que al final se pierde, pero a mi no me haría falta perderte para saber que es lo que perdería. Y es verdad, perdería a un verdadero hijo de puta! Bah… pero yo que culpa tengo si ya no se acuerda, que le pete un pez espada y san sacabó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario